En la antesala de la siembra fina 2022/23, observamos un mapa comparativo con una actualización de las reservas de humedad, reflejando el contenido de agua en campo en la superficie agrícola. Desde los primeros días del mes, los aportes de agua se han acotado a determinados sectores del norte del país, fundamentalmente en la región del NEA.
Se corrobora la desaparición casi total de los excesos hídricos en la provincia de Entre Ríos, con almacenajes que oscilan entre las categorías de adecuadas a óptimas. Sólo perduran algunas zonas puntuales con saturación de perfiles en el extremo noreste provincial, sobre los departamentos de Federal y Feliciano. Una situación similar se observa en Corrientes, con la permanencia de excedentes en áreas del norte.
En lo que respecta a Santa Fe, se aprecian ligeros desecamientos generalizados, aunque con un panorama favorable en prácticamente todo el territorio. Sólo se identifican áreas con deficiencias moderadas en los departamentos de Belgrano e Iriondo. Los patrones de humedad son comparables a la franja este de Córdoba, pero comienzan a degradarse a medida que nos trasladamos hacia el oeste de la provincia, como son los casos de Juárez Celman y Río Cuarto.
Por otro lado, se verifica un predominio de reservas de adecuadas a óptimas en la mayor parte la provincia de Buenos Aires, salvo determinados partidos del norte, que cuentan con niveles regulares.